Si vuestro cierre metálico es manual y ya no aguanta más el tener que subirlo y bajarlo todos los días, el cerrajero Rasncaya os recomienda que le adaptéis un motor, para que os facilite la vida y vuestro trabajo sea más productivo y no os dará más problemas el tener que manipular el cierre metálico con vuestra fuerza.
Ventajas de los cierres con motor
Estos cierres metálicos motorizados son demasiado útiles y cómodos, puesto que ya no pasaréis trabajo a la hora de subir el cierre y de bajarlo, estos motores se accionan mediante un botón fijado en una pared, tan solo con pulsadlo y la persiana bajará de inmediato. Si tenéis presupuesto, podréis comprar un cierre metálico programable, estos cierres los podéis programar para que funcionen a las horas que quieras, y así vais a promover el ahorro de energía.
Además, estos cierres metálicos actúan como perfectas herramientas de disuasión para los ladrones ya que, si vosotros programáis el cierre metálico para que cierre y abra a distintas horas, daréis la sensación a los maleantes de que hay gente en vuestra casa, además, podéis usar esta fuerza disuasoria si te vais de vacaciones o si vais a pasar unos cuantos días fuera de casa.
Son relativamente fáciles de instalar, a ver, no necesitáis ser un profesional para instalar el motor, pero no es a prueba de tontos, tenéis que saber hacerlo, si sabéis un poco de electricidad y mecánica, lo podéis hacer, pero si no, ya sabéis lo que tenéis que hacer, la opción más confiable: llamar al profesional, una información extra, los cierres metálicos de nueva generación vienen con una manija de emergencia en caso de fallas de electricidad, así que, con los cierres modernos tenéis dos en uno, automático y manual a la vez.
Claves de los cierres metálicos
Cada día que pasa veis más cierres metálicos en zonas residenciales, ya que son fáciles de instalar y proveen de mucha comodidad, además supone un ahorro de energía, que se verá reflejado en vuestras facturas mensuales.
Los cierres metálicos se usan a través de un botón o un control remoto, algunos cierres metálicos se pueden usar desde el Smartphone e inclusive lo podéis conectar vía WiFi, ya con este último modelo, podréis administrar vuestro cierre metálico si estáis fuera de casa.
Hay algunos cierres metálicos cuyos motores tienen sensores de detección de rayos solares, si queréis uno de esos, vais a estar ahorrando mucha energía.
Cosas a tener en cuenta a la hora de comprar un motor
Primer consejo, debéis siempre saber el ancho de las cintas del motor, están en un rango de entre 15 y 23 cm, los de 15 cm se les llama motores mini, o compactos y los de cinta 23 cm se les llama modelos de motor de cinta ancha.
Segundo consejo, debéis saber de qué material está hecho el cierre, pero habitualmente han sido fabricadas de aluminio o plástico.
Variedad de los motores
No hay mucha variedad entre los motores de los cierres metálicos, ya que hay solo dos tipos de motores, el más común se llama motor tubular, también están siendo demandados los motores de cinta
Motores tubulares
Este es un motor que se coloca dentro de un cilindro que tienen los cierres metálicos, se demanda mucho este motor ya que no es difícil de instalar.
Si queréis instalar este motor, solo seguid estos pasos:
Paso 1: colocad el motor tubular dentro del cilindro del cierre metálico.
Paso 2: Debéis encajar bien la estructura en su caja para que no haya problemas, si lo habéis colocado bien, el cierre va a funcionar correctamente sin problema alguno.
Paso 3: debéis hacer la instalación eléctrica del cierre, para que el motor obtenga energía para poder funcionar, esta instalación debe estar protegida y cableada de una maneta tal, que no se vea ni que la gente vaya a tropezarse cuando pase cerca, lo más recomendable es colocar un tomacorriente cerca, así no gastaréis en cable y quedará sin peligros. No es difícil, pero sabemos que para muchas personas no.
Paso 4: debéis comprobar que el cierre esté funcionando de manera correcta, si tenéis el motor del cierre conectado a un control remoto o por el Smartphone, debéis ver si todos funcionan de manera perfecta.
Motores no tubulares o de cinta
Hay un tipo de este motor que es de empotrar, para efectos de estética, este motor va anclado a la pared, en donde no puede verse, normalmente va en la parte inferior del cierre
El otro tipo son los motores de plano o superficie, estos van en una caja sobre la pared, no en una cavidad como los descritos anteriormente, si no tenéis cavidad en la pared y queréis una instalación rápida y sencilla, este motor es ideal para vosotros.
Puntos que no están de más cuando vais a comprar un motor para cierres
Hay un tipo de motores para los cierres que tienen sensores solares, estos motores hacen que se suban o bajen los cierres tomando en cuenta la temperatura de vuestra casa y del estado del tiempo, este tipo de cierres ayudan a corregir la cantidad de sol que entra en la casa y, sobre todo, os ayudará en ahorrar aire acondicionado y calefacción, vuestro bolsillo os agradecerá al fin del mes, cuando lleguen las facturas.
Para la comodidad, los cierres metálicos con control remoto son de lo mejor para vosotros y vuestros brazos y espalda os lo agradecerán, si tenéis varios cierres podréis programarlos para que, con un solo control remoto controléis a todos los cierres, es muy práctico a la hora de iros a dormir, ya que sólo deberéis pulsar el botón de bajar los cierres y no pasar por la desgracia de ir de uno en uno.
Podéis programar vuestros cierres para que suban y bajen a unas horas determinadas, podéis hacer la programación todos los días si queréis, es un buen método para que los maleantes piensen que estáis en casa todo el tiempo, para evitar robos si estáis de vacaciones, es muy bueno programar los cierres a determinadas horas para que no os roben.
Debéis qué tipo de motor va bien con vuestro cierre, ya que si compras un motor de menor potencia para vuestro cierre, que es pesado, el cierre no os subirá y puede acarrear mayores problemas, consulta con los profesionales acerca de cuál es el motor que mejor se adapta a vuestras necesidades y a las necesidades de vuestros cierres metálicos, que sean de la potencia necesaria para que trabajen adecuadamente.